VAPOR Y LUMBRE

Me levanté temprano,quería disfrutar de la mañana,
dejar que el sol inunde mis sentidos,
abrir de par en par,cada ventana
y que sus rayos acaricien mi pelo con su brillo.
Imaginé un paisaje entre montañas
con un río rodando entre sus piedras,
descalza y entre tules vaporosos
sentirme nube y brisa,sol y espuma...
Alzar mis brazos y ser ave en un instante
dejar mi cuerpo,esperando a mi regreso
y así aliviar de mi alma,el agobiante peso
que a veces traen a mí,algunos recuerdos.
Vagué por prados verdes y por bosques,
por flores de colores...perfumadas
apagando mi sed con agua helada
y frotando mi piel con hierbas aromadas...
Me pareció encontrarte en el sonido del viento,
oír tu voz en el rumor de aquel recodo turbulento
seguí flotando etérea y transparente
y cual rayo de luz,penetraste mi esencia.
Y así los dos,vapor y lumbre,brisa e iridiscencia
fuimos entrelazándonos con fuerza
pero sin amarrarnos,sin perder libertad
buscando solamente nuestra felicidad,
un oasis,un bálsamo...la calma
que junto a vos,soñaba hallar mi alma.

Arcoiris,29/10/10

ESPIRITU LIBERTARIO

Tuvo por madre una patria ambiciosa,despiadada
con dinastía de reyes y de colonias plagada,
que aquí en el sur y a escondidas,en esta América nueva
parió a una hija plebeya y desde el otro hemisferio
sometió al naciente imperio junto a su joven doncella.

Fue una hija sin nobleza,sin casta,sin jerarquía,
que además de su belleza y su heroica rebeldía
muy pronto descubriría una gran necesidad:
El deseo casi urgente de ganar su libertad.

Del indio heredó el coraje,del negro,la resistencia
para enfrentar con vehemencia,de su madre aquél pillaje
que en grandes barcos el oro por espejitos trocaba
llevando así las riquezas con artimañas y trampas
que la joven inexperta,ostentaba en estas pampas.

Otros llegaron con cruces hablando en nombre de un dios
para que ya no adoraran la Madre Tierra ni el Sol,
se construyeron misiones para imponer al dios nuevo
y el indio sufrió en silencio el destierro de sus credos:
Viracocha,Pachamama,Inti,Quilla y otros tantos
fueron motivo de llanto desde el mapuche al mataco.

Con gran astucia lograron que cultivara este suelo
y enviara tributos luego a aquella madre arrogante
que la observaba exultante entregar sus dividendos
alardeando de poder,ignorando sentimientos.

Su música se acalló,dejó de sonar el viento
que el mismo indio afinó dentro de cañas y huesos.
Todo su arte se perdió,sus danzas,cantos y ruegos
ya no hubo más apachetas ni ofrendas en torno al fuego.

Pero hace doscientos años su hija se liberó
el criollo la protegió formando un gobierno patrio,
pues ella también fue madre de muchos hijos valientes
con igual sangre caliente y espíritu libertario,
salidos de las entrañas de aquella indómita niña
que heredó de Centenera,este nombre:"La Argentina".

Arcoiris,01/09/10

(Concurso Bicentenario,escritores de la región NE,dpto.San Justo)